TRATADO DE LIBRE COMERCIO URUGUAY – CHINA
El anuncio del gobierno nacional de la conclusión favorable del estudio de factibilidad, con el fin de iniciar las negociaciones de un Tratado de Libre Comercio entre la R.O. del Uruguay y la R.P.China, me permite realizar algunas reflexiones.
De los tantos capítulos que puede tener el tema, en esta instancia me concentraré únicamente en DOS, régimen de origen para la exportación y la gestión de la defensa de fronteras del Uruguay.
RÉGIMEN DE ORIGEN (en la Exportación)
La posibilidad de captar nuevas inversiones de agentes económicos en nuestro país, en el marco del acuerdo, estará directamente vinculada a las condiciones que tengan de producir o “agregar valor”. Ello resultará de la negociación del régimen de origen que se establezca.
Si las cláusulas que se negocien en dicho régimen permiten acceder a materias primas regionales y establecer condiciones “flexibles” de acumulación de origen, seguramente podremos captar “el interés en el barrio”, que verían en Uruguay un aliado cual “trampolín” para exportar al gigante asiático.
El diferencial para nuestro país estaría entonces dado por el entusiasmo que los inversores tengan en cumplir con esas reglas, con el objetivo de acceder a un mercado muy potente y en condiciones arancelarias mejores a las que acceden hoy. Pero necesariamente con productos en un estadio de agregado de valor superior.
La competitividad productiva, laboral y logística de nuestro país, se pondrá en juego en este modelo de negocio. Si logramos ser eficientes, flexibles y establecer los incentivos adecuados, podríamos convertirnos en un destino de inversiones regionales muy interesante. El “número mágico” que capte ese potencial interés saldrá de la diferencia entre el valor del arancel que pagan ciertos bienes al momento de su importación a China en su condición actual vs. la suma del proceso de agregado de valor (o la condición que establezca la regla de origen) más los costos logísticos, y productivos locales.
Sinceramente creo que, desde hace muchos años no se abre una chance como la que se podría dar de la mano de este acuerdo, al menos en este capítulo. Las posibilidades son muchas, tenemos una oportunidad de ocasión que deberíamos aprovechar, y que generaría riqueza para nuestro país y sus habitantes.
Las turbulencias regionales en un marco de estabilidad local ayudan; pero los números son los que mandan.
DEFENSA DE FRONTERAS
Un amigo de un país limítrofe me pregunta, ¿van a importar productos chinos con arancel cero y los van a “rebolear” a los países vecinos?…
Esta rebuscada pregunta me disparó la inquietud de considerar que este comentario tan poco serio, podría esconder cierta desconfianza más tangible en grupos de presión que se encuentran a algunos cientos de kilómetros de nuestras fronteras. Debemos asegurar a nuestros vecinos que, ¡los productos que se importan…se quedan en casa!
Algunas de nuestras fronteras, están hoy vigiladas por el Ministerio de Defensa Nacional. Esta experiencia ha tenido un resultado fenomenal, desalentando algunas viejas prácticas de distorsión de comercio que son históricas de nuestra región. Tenemos que apoyarla y reforzar la línea en la que se viene trabajando, tanto en materia de coordinación interinstitucional como en el incremento de más y mejor control.
El nivel de cumplimiento y eficiencia en esta tarea será directamente proporcional a la credibilidad que logremos con “los de afuera” en el cumplimiento de que lo ingresado al mercado local, no tenga un destino diferente.
Leonardo Couto
28.07.2022
